La naturaleza nunca dejará de sorprendernos, y de eso están seguros los científicos quienes han descubierto siete especies de ranas en la región amazónica cuya característica es que son muy pequeñas, todas aún más pequeñas que la uña de los dedos, y que pocas veces han sido vistas. Las Ranas “miniatura” viven en cumbres aisladas en los bosques de Brasil, lugar que se ha caracterizado por éste tipo de fauna.
Sin embargo sus hábitats están siendo vulneradas debido al cambio climático, la tala ilegal, etc y ésto hace que las ranitas modifiquen su lugar dónde viven adentrándose en suburbios. Las ranas pequeñas, son parte del género brachycephalus, conocido desde 1800, que normalmente habitan en los bosques del sur de Brasil. Ante la sospecha de que más de estas ranas podría estar escondido en la parte sur del Atlántico, los investigadores decidieron adentrarse en la búsqueda de ellas en nuevas regiones de aquel país.
Allí descubrieron varias especies nuevas de ranas, incluyendo siete que nunca antes habían sido vistas. Todas las ranas encontradas son de menos de 1 cm de longitud, y todas ellas parecen caramelos, con múltiples colores y en tonos brillantes.
El nuevo brachycephalus mariaeterezae, por ejemplo, tiene un color anaranjado brillante. Y el olivaceus brachycephalus, haciendo honor a su nombre, tiene un color marrón verdoso. El auroguttarus brachycephalus tiene una cabeza de color amarillo brillante y marrón.
Tanto éxito en el descubrimiento de nuevas especies puede indicar que el número total de brachycephalus se desconoce y siempre se pueden descubrir más. Éstas ranas terminan viviendo en comunidades aisladas, jugando juntas y evolucionando en especies completamente separadas de otras ranas.
Esto es sólo el principio. Especialmente teniendo en cuenta el hecho de que se han encontrado otras especies que se encuentran en el proceso de descripción por lo que seguramente pronto podremos volver a sorprendernos de éste tipo de especies.